En Bilbao sí es fiesta en Carnaval

Y es que para aclarar primero de todo el título de este post, en Madrid no es fiesta cuando llega Carnaval.

Siempre me ha sorprendido esto de los carnavales, la verdad, porque de donde yo vengo apenas se celebra esta fecha.

Sí es verdad que cuando llega la cita ves en las calles a los niños disfrazados, eso sí, aunque también es cierto que ellos lo celebran todo. Y también es verdad que el sábado de Carnaval hay un montón de actividades e incluso ves a algún grupo que otro en el metro que va disfrazado hasta esas actividades que se han organizado.

.
¡Y poco más!. No hay colas en las tiendas de disfraces, no hay barracas en el Centro, no llenamos las tiendas de telas y las mercerías en busca del complemento perfecto para hacernos ese disfraz casero y, por supuesto, no acabamos con las existencias de pintura para la cara.

Y es que este pasado fin de semana en Madrid ha sido uno más y es por eso que a mi ésto del Carnaval no me llama la atención demasiado (no me gusta nada de nada, quiero decir). No he hecho nada especial porque  no tengo tradición en mi cuerpo.

Cuando llegó el sábado, para mi, no fue ese día el colofón a semanas preparando mi disfraz ni tenía esa gran cita con «la cuadrilla» tras la último gran evento de reunión, allá por Santo Tomás. Mientras medio (o todo) Bilbao salía bajo la lluvia con sus mejores galas carnavaleras yo me dediqué a vivir un fin de semana de lo más normal. 

Ya sabéis que me suelo unir a toda tradición de Bilbao que se precie y, ahora que lo pienso, ésta es de las pocas que no me gusta NADA DE NADA.